Hace tiempo se
discute qué tanto la energía positiva o negativa nos afecta como seres humanos,
o hasta hay personas que consideran que estas energías no existen. Ciertas o
falsas, lo real es que las energías al menos emocionalmente nos afectan. No es
lo mismo ser tratado con cariño todos los días que a que poco a poco todos
pongan su granito de arena para desmotivarte. La energía negativa usualmente
nos daña de maneras abrumadoras y terribles.
Cada que tú misma
te llamas gorda, asquerosa o cuanto insulto se te ocurre, te dañas, y no me
digas que no, porqué sé bien que lo haces. Hay experimentos o “trucos” Ana-Mia
que sueles hacer para “motivarte” a perder peso, cosas que yo desapruebo
totalmente porque son HUMILLANTES, tú, sin importar el peso, no das asco, ni
nada por el estilo. No necesitas la energía negativa de los demás y mucho menos
la peor de todas que sólo tú te generas. Sé que muchas de nosotras tenemos
cicatrices, algunas en las manos, otras en las piernas, otras en el estómago y
las más sádicas dentro de la boca. No, chicas, yo realmente creo que eso es
completamente innecesario, aún durante el ayuno algunas se agreden. De eso no
se trata, si perdemos peso es para sentirnos hermosas, maravillosas,
agraciadas, delicadas, tan ligeras como hadas, finas como sirenas, queremos ser
divinas como ángeles. Entonces ¿Qué tiene que ver eso con la humillación?
¡Nada! ¿Por qué hacerlo? Si te agredes sólo te desmotivas, y si te desmotivas
estás más cerca de caer en la tentación de la comida. Tienes que aprenderte una
cosa, si bajas de peso es porque te amas y como te amas mereces ser hermosa, no
mereces estar gorda, ser gorda es un castigo, ser delgada un premio, y como los
premios cuestan trabajo te esfuerzas, puede que aún no alcances su menta pero
piensa: estas trabajando por ella, mereces un premio, unas palabras gentiles,
flores hermosas, cartas de amor, aunque las escribas tú, las mereces, necesitas
ropa lujosa que usará tu cuerpo cuando tengas la gracia de las ondinas. Las
guerreras como tú no se menosprecian, así no se ganan las guerras, las
guerreras deben de estar rellenas de pura confianza y de sentirse capaces de
hacer todo lo que se propongan. Cada día dedícate una canción, un té de un
sabor exótico, un regalo, un momento de paz, una siesta, algo que te haga más
bella. Eres especial, no necesitas humillarte. Cada que alguien te diga o te
haga sentirte mal o incluso si lo haces tú, detente en el acto, di lo
siguiente:
-Yo ya soy
hermosa, soy hermosa por dentro, si hago todo esto es para que las personas vean
mi belleza relucir a través de mí. Soy imperfecta, soy una persona, pero como
persona sé corregir errores. Soy valerosa, lo demostraré.
Sé que cuando te
agredes muchas veces a veces te cuesta creer que puedes lograr algo, pero créeme,
dilo lo suficiente, hasta que te lo creas, así como fue que te crees eso de que
no lo eres, tienes que repetírtelo hasta que sea tu realidad.
Eres hermosa,
sólo necesitas pelear por tu premio, el cuerpo que quieres, el cuerpo con el
que sueñas.
Las personas
tenemos un mecanismo de defensa bien chistoso, si una persona en cuestión se
menosprecia, su cuerpo buscará aumentar de tamaño para imponerse, en otras
palabras: engorda. Si la persona está confiada, su cuerpo funciona
apropiadamente, y por ende si tiene sobrepeso, su metabolismo mejora, trabaja
más rápido. Así que antes de que vayas a hacer algo como esos “trucos” de
Ana-Mia donde se te pide hacer barbaridades con tu cuerpo, olvídalo, no lo
hagas, apréciate, recuerda que para que otros te amen primero debes de amarte
tú, tu cuerpo te lo agradecerá perdiendo
algunos kilitos de más.
Miss RB
